Primeramente doy gracias a la vida y a Dios por haberte cruzado en mi camino. Sé que fallé y ya lo acepté, acepté ese gran error que cometí
al haberte dejado ir, alejarme de ti... Los dos sufrimos yo lo sé, aunque yo fui la que tomó esa decisión, me dolió tanto que no te imaginas los días y noches que dormía entre lágrimas por no tenerte junto a mí.
Y fue esa maldita confusión y distancia las que me hicieron pensar y no poder llegar a nada bueno para nosotros.
Odio tanto esos días lejos de ti, que aunque te tenía cerca te sentía tan pero tan lejos, aunque también doy gracias por ellos, porque así pude darme cuenta de todo el amor que me tenías y tienes.
Hoy, viviendo ese gran amor que nos tenemos el uno hacia el otro, te doy las gracias por haber aguantado tanto tiempo lejos de mí, esperando a que yo tomara una decisión, esa decisión que creo ha cambiado nuestra relación, nuestros ¡sentimientos!
Y bien, gracias al tiempo transcurrido hoy puedo decir que no me equivoqué al haberte elegido a ti, y también darte las gracias por tanto esperar. Te amo. En este texto está un poco de nuestra historia.
Al estar separados por motivos de estudios, fue muy grande mi desesperación que llegué a la confusión de lo que estábamos viviendo, y fue así como yo tomé la decisión de no seguir más.
Él, espero a que yo regresara, teniéndome ese mismo amor de antes, y ahora gracias a eso, estamos juntos de nuevo. Nos dimos cuenta que nuestro amor es más grande que todo. Vamos chicos y chicas hay que creer en el amor, aunque a veces nos equivocamos al tomar decisiones no correctas sabemos que alguien siempre nos esperará. Ánimo...
Que cada vez que te veo mi cuerpo tiembla... Que cada que te vas tu ausencia mata mi existencia... Que por las noches y sin quererlo ruedan lágrimas sobre la almohada, rogando a Dios que no te vallas de mi lado.
Yo sé que no me perteneces y también sé que no lo vez cuando te veo, pero se iluminan mis ojos con sólo tenerte cerca... Y aunque sólo seamos amigos... ¡Para mí eres todo!
Yo me conformo con tener tu amistad, no importa si tengo que sacrificarme, por verte feliz mi amor yo sería capaz de dar ¡la vida misma! Sólo quiero que sepas, que si tú supieras de este amor, te sorprenderías de que exista alguien que te ame como yo...
¡Te amo!
Es corto, pero de verdad expresa lo que siento
Me sentaba a tu lado, veía niños correr y jugar aun siendo yo uno de ellos prefería escuchar tus grandes historias, tus anécdotas las cosas que pasaste y las que te faltaban saber el porqué de tu cicatrices, cuándo te enamoraste por primera vez, te parabas y caminabas por un vaso de agua o sencillamente una fruta aunque era una niña entendía lo que me decías y siempre lo recordaba aún lo recuerdo, recuerdo cuándo nos sentábamos a escuchar las brisas calidad, el sonido del mar y la hermosa canción de los pájaros te sentabas a mirarme a protegerme cuándo jugaba, si me caía corrías a socorrerme y ayudarme.
Intentabas y preguntabas siempre como estaba y cuando no me veías te extrañaba porque no estaba a veces cuándo somos niños las personas toman decisiones por las cuales no podemos hacer nada no entendemos a esa edad porque esas decisiones a la ligera, recuerdo cuándo no podías hablar mucho, te cansabas y te costaba respirar pero aun así me dabas tu bendición con una sonrisita y esa mirada que alegraba el alma con tanto amor, llegó el día de emprender mi viaje el primer viaje en tantos años ya era grande y era un poco cociente mi felicidad y alegría era enorme claro que niña no le gusta viajar y conocer cosas nuevas por la hora de vuelo no pude ir a despedirme como siempre lo hacía con ese beso y un gran abrazo.
Pasó el tiempo y te extrañaba nos enteramos que tu enfermedad estaba agravando pero tenía fe que volvería y te vería sentado en tu linda mecedora en la puerta esperando ver subir a las personas que te querían con tanto amor, llego el día al fin te vi, y te abracé claro fue en un sueño pero lo hice increíble pero cierto, al despertar vi que fue un sueño que se convirtió en pesadilla esa noche te fuiste al cielo, quise venirme aun estando tan pequeña por lo menos para verte pero no se pudo llegue tarde, sé que me quedare con ese hermoso recuerdo que aunque fue en un sueño vive en mi. Gracias a ti por tu amor y tu dulzura hoy te extraño y te recuerdo siempre.
Gracias a ti entendí que debemos valorar y demostrar amor a nuestros seres queridos todos los días de nuestras vidas así sea con un humilde gesto de cariño a ti te agradezco todo y nada. Gracias tío, hace seis año te despediste, pero sé que desde lo más arriba me vez y me cuidas con mucho cariño. No te vi reposando en tu nueva cama, pero si en tan hermoso sueño... ¡Fuiste y siempre serás un hombre grandioso!
Con sólo la compañía de un cigarrillo me he detenido a contemplar el cielo estrellado sin cambio alguno aparente que le afecte, como a mí... Tu ausencia. Me he detenido a reflexionar sobre mis antiguas pasiones y he concluido que son superables. Me he detenido a pensar sobre tu modus operandi y he llegado a comprender que si me amas...
Eso me ha puesto febril, me incomoda, me emociona y me entristece, porque no estás aquí compartiendo conmigo estos espacios, este momento, este sentir. Te extraño y mi razón juzga y recrimina tu ausencia, yo en cambio la acepto no como un simple consuelo sino como el resultado de todo lo que has sembrado en mí y no ha podido germinar.
Pareciera que el tiempo es nuestro mejor aliado, la pasión nuestra motivación y el amor... nuestra voluntad.
Gracias por la razón que me entregas para seguir adelante; el hecho de poder verte cada día, presenta en mí la energía suficiente para despertarme cada mañana. No puedo morir sabiendo que pude observar tu sonrisa una vez más, sentir tu rostro junto al mío y tu cabello rozando mis manos al recostarte en mis brazos. Eres esa especie de droga que me obliga a continuar camino en mis mejores momentos, mi debilidad crece al estar dejos de ti y mi memoria retrocede a cada instante que estuviste a mi lado.
Por cada deseo de tocarte mi mente escribe su propia historia a la espera de susurrar a un costado de tu cuello las palabras que dan inicio a mi locura hacia tu ser. La necesidad de hablarte me envuelve en engaños que me prometen verte de nuevo; mi cerebro se alía con mi alma para preservarte cercano a mi corazón.
Desde la soledad que puede sentirse en eso que a veces la gente llama amor, comencé a conversar con mi sombra. Después de todo es la única que siempre está conmigo. Aunque, al igual que a eso del amor, puede verse cerca pero a la hora de sentirla es sólo un espacio ocupado por el reflejo de aquel espejo en el que uno sólo se mira. Aun así le hablé. Le conté de lo triste que me hallaba.
Le hablé de lo sólo que estaba y de lo poco correspondido que me sentía. Y allí junto a mi sombra lloré. Recordé los tiempos aquellos cuando lo único importante era sentir que el día era eterno y mis juegos irrompibles. Que nada era lo suficiente cruel para herirme ni tan bueno como para hacerme sentir que sólo a eso me debía.
Ahora cuando me ahogo en la idea de aquel mundo perfecto que me soñé y veo que no es así descubro mi miseria, la miseria del hombre. Y cuando el sol cayó, huyó mi sombra a mí. Fue entonces cuando comprendí que aquello a lo que la gente llama amor es real. Porque es el amor como tu sombra quien está a tu lado en todo momento y en momentos de tiniebla es capaz de habitar en ti.
